No vendemos eventos perfectos sino PERSONALES hechos y pensados con mucho AMOR y mucha CABEZA. En Doña Imperfecta, no nos gusta la producción en cadena, no nos gusta lo standard, no queremos hacer muchas bodas, si no, hacer ESPECIAL cada una de las que organicemos porque creemos que esa es la clave que nos permita seguir siempre enamoradas de nuestro trabajo. Para nosotras, no existe la fiesta perfecta, lo que existe es la fiesta de cada persona. Cada fiesta tiene que mostrar la personalidad del anfitrión, en cada detalle el invitado tiene que percibir la esencia de los protagonistas.

Sobre las bodas (que es lo que nos ha traído hasta aquí) ¿qué os podemos decir de nuestro concepto? Que las únicas espadas que nos gustan son las láser de luces de colores, esas que no sirven para cortar tartas pero que en la barra libre de vuestra fiesta en total oscuridad, dan “un rollazo” increíble. ¿Las ligas? nos quedamos con las de fútbol de cualquier país pero advertimos que no estamos muy puestas en el tema. ¿Corbatas o pajaritas? Cualquier opción de las dos es perfecta si empieza y acaba la boda intacta, es decir, entera y en el cuello del apuesto caballero que la porta.